Fue 1-1. Valeri convirtió para el equipo de Cabrero y luego se fue expulsado. La igualdad llegó a través de Mendoza, de cabeza. El local sumó el primer punto del campeonato, mientras que el Globo sigue sin ganar ni perder en este Apertura. Sánchez Prette vio la roja en la visita.
Decir que Lanús y Huracán son dos de los equipos que mejor juegan al fútbol sería muy apresurado. Recién va una fecha del torneo y ninguno de los dos pudo demostrar demasiado en el debut. Pero sí, se puede hacer memoria y recordar la temporada pasada. Uno en Primera y otro en la B Nacional, mostraron tener jugadores de buen pie y técnicos que piensan más en el arco rival que en el propio. Por eso, hoy en el sur, había grandes expectativas de buen juego y muchos goles.
En su debut, el Granate hizo un buen partido, pero falló en el fondo y lo pagó muy caro contra Independiente. Demostró ser dos equipos muy diferentes a la vez. Uno del medio para arriba y otra de la mitad de la cancha para atrás. Cuando ataca, lo hace de muy buena forma, con jugadores muy rápidos y jóvenes que se entienden casi a la perfección. Pero cuando defiende comete algunos errores que se terminan lamentando. Independiente le hizo cinco goles en la primera fecha. Aunque Lanús metió tres.
Para el Globo es diferente la situación. A pesar de que mantuvo a buena parte de sus jugadores, se reforzó mucho y perdió a piezas claves como Larrivey o Milano. A pesar de eso, el Turco Mohamed logró que sus nuevos hombres se acoplen enseguida y en el debut ante Arsenal muestren algo de ese buen juego que pregona el DT en los equipos que dirige. Obviamente, todavía es un equipo en formación y necesita trabajar mucho para poder crecer y aspirar a algo más que salvarse del descenso. Hoy, era un partido clave para demostrar que por algo se empieza.
Y desde el comienzo, el partido se tornó entretenido. Los dos entrenadores plantearon el encuentro pensando en el arco rival y sus jugadores no escatimaron en llegadas a los arcos. Primero lo tuvo Lanús, después Huracán. Más tarde se acercó el Granate en un par de ocasiones y luego volvió a hacer lo mismo el Globo, también por duplicado. La llegada de algún gol era cuestión de minutos. Los dos lo merecían. Y los dos lo iban a conseguir.
Primero pegó el Grana. Y lo hizo por una jugada preparada. Maxi Velázquez se paró delante de la pelota en un tiro libre y en vez de pegarle al arco, la tocó para que Diego Valeri patee por el costado de la barrera. Bomba del mediocampista y golazo para Lanús, ante la estirada de Marcelo Barovero. Iban 39 minutos y el partido recibía lo que tanto esperaba tras varias chances para convertir: un gol.
Pero ese tanto no llegó solo. Al igual que en el partido ante Arsenal, el de Parque Patricios reaccionó enseguida y empató el encuentro. Cristian Sánchez Prette aguantó la marca, escapó por la derecha y tiró un centro perfecto para la cabeza de Franco Mendoza. El ex Banfield saltó y entre dos defensores la mandó a guardar en el arco de Carlos Bossio. Empate justo por lo hecho en todo el primer tiempo, a pesar de un gol mal anulado a Lautaro Acosta, por un error del asistente.
En la segunda etapa, el Globo se apoyó en el juego de Walter Coyette, pero Lanús supo controlarlo. Igualmente, siguió en la búsqueda del desnivel, aunque nunca logró conseguirlo. El Grana, lo mismo. Buscó y buscó, pero tampoco consiguió el segundo tanto, que merecía, pero que también a la vez iba a ser injusto por la actuación de ambos en el campo de juego. Cerca del final, Valeri pegó una patada en la mitad de la cancha y vio la segunda amarilla. Lo mismo ocurrió con Sánchez Prette, que también dejó a su equipo con diez hombres.
El empate sirve, obvio. Pero seguramente dejó con algún gustito amargo a los dos equipos que todavía no pudieron ganar en el Apertura, aunque Lanús sí lo hizo en la Copa Sudamericana, ante Estudiantes. Lo que está claro es que con algunos retoques, los dos darán que hablar en el torneo.
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